Para la mayoría de las personas es común sentir seguridad en el hogar, pues éste les brinda comodidad  y familiaridad;  sin embargo, existen también peligros que pueden provocar accidentes causados por negligencia o desconocimiento.

Es normal que las personas pasen bastante tiempo dentro del hogar, lo que incrementa sus posibilidades de sufrir algún accidente; pero no todos los miembros de la familia tienen las mismas probabilidades de que esto les ocurra; ya sea por su condición y/o mayor tiempo de permanencia en el hogar, como es el caso de los adultos mayores.

Por fortuna, existen varias acciones que pueden dar mayor seguridad a nuestros hogares y a nuestros seres queridos.  A continuación comentamos algunas:

Prevenir heridas y hemorragias dentro del hogar:

Las heridas y hemorragias son los accidentes más comunes dentro del hogar, debido al contacto de manos y pies con objetos cortantes. Para evitar este tipo de accidente, es importante poner fuera de alcance todos los objetos punzo cortantes, colocando cuchillos en los cajones con la punta ubicada hacia adentro y no darles otro uso que aquel para el que están destinados. También se deben revisar constantemente los platos y vasos para verificar que no estén quebrados o rasgados.

Otra forma de evitar este tipo de accidentes es guardar las cuchillas y navajillas de afeitar en lugares distintos a los de utensilios del baño como jabones, cremas y peines.

Si ya el accidente ha ocurrido, la mejor forma de parar la hemorragia es tapar la herida, haciendo una fuerte presión sobre la misma.

Prevenga quemaduras por calor o químicos

Las quemaduras son provocadas normalmente por el contacto con objetos o líquidos a temperaturas elevadas, como cocinas, lámparas, agua y aceite. Para prevenir estos accidentes es importante colocar protecciones en los objetos calientes, no sobrecargar los enchufes eléctricos, utilizar guantes a la hora de tener contacto con los mangos de los sartenes, además de verificar que éstos no se sobresalgan del mueble de la cocina.

Cuando se trabaje con productos peligrosos como ácidos, debe manipularlos adecuadamente y mantenerlos alejados de candelas, fósforos o encendedores.

Cuando el accidente ha ocurrido, se debe de apartar inmediatamente al accidentado de la fuente de calor.  Si la ropa estuviera en llamas, se debe de intentar apagar con mantas o rodando a la persona por el suelo; no se debe de despojar a la persona de su vestimenta, salvo que la quemadura haya sido por productos químicos.

Por último, se debe de calmar el dolor sumergiendo la zona afectada en agua durante diez minutos.

Prevenir caídas y golpes en el hogar

Entre las causas principales que provocan este tipo de accidentes se encuentran los suelos con agua, aceite o grasas, provocando que las personas resbalen al caminar.  Otras causas son los huecos abiertos y mal protegidos, además del uso de elementos inadecuados para alcanzar objetos, por ejemplo una silla en lugar de una escalera.

Para prevenir caídas y golpes en el hogar, es importante mantener el suelo libre de obstáculos y evitar que tengan alguna sustancia resbaladiza. En lugares como el baño, se deben colocar alfombras anti-deslizantes que eviten resbalarse a la persona.

A los adultos mayores es importante ubicarles barandillas en lugares de difícil acceso como las escaleras o la ducha, además de asegurarse que éstas estén a la altura idónea.

La forma de actuar ante un accidente por caída o golpe, es utilizar hielo para calmar el dolor del accidentado, ayudando también a disminuir la inflamación  Además, es importante contar con analgésicos en el hogar. Si se trata de un esguince o fractura, se debe inmovilizar a la persona y comunicarse inmediatamente con los servicios de emergencias médicas.

Con un poco de precaución ¡podremos convertir nuestros hogares en un lugar más seguro para todos!

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